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Hay un segador cuyo nombre es Nekros. Proporciona un control de multitudes mortal. Los antiguos enemigos se convierten en aliados cuando Nekros llama a los reclutas de entre los muertos.
Un golpe tan poderoso que convierte el alma del enemigo en un proyectil mortal, dañando todo a su paso. Los enemigos que sobreviven al golpe quedan marcados para la cosecha y se convierten en una de las sombras de los muertos de Nekros si mueren mientras están marcados.
Infunde miedo en los corazones de los enemigos cercanos, haciendo que huyan aterrorizados.
Fuerza a los enemigos caídos que te rodean a proporcionarte botín adicional.
Invoca versiones sombrías de enemigos vencidos para luchar junto a ti por un corto periodo de tiempo.